Hemos viajado a Londres para contaros nuestras impresiones de Pokémon Escarlata y Púrpura, la nueva aventura de Pokémon basada en España.
Gracias a Nintendo España hemos tenido la oportunidad de viajar hasta Londres para visitar las oficinas de The Pokémon Company y poder probar Pokémon Escarlata y Púrpura, o Pokémon Españita, como prefiráis, y vamos a contaros qué nos han parecido nuestras primeras horas en Paldea. Estas son nuestras primeras impresiones tras jugar Pokémon Escarlata y Púrpura en Nintendo Switch.
Vamos a comenzar por la historia, o bueno, por las historias, porque esta vez no habrá solo una. Asumiremos el papel de un estudiante de la academia Naranja o Uva, dependiendo de la edición que escojamos, y nuestro objetivo será participar en una actividad extracurricular llamada “La Búsqueda del Tesoro“. Esta propuesta se dividirá en tres caminos distintos que podremos completar en el orden que queramos, y cada uno, nos propondrá pruebas y rutas diferentes.
En primer lugar tenemos la Travesía de la Victoria, el camino más tradicional de la saga Pokémon. Aquí tendremos que recorrer Paldea derrotando a los diferentes líderes de gimnasio para hacernos con todas las medallas de la región.
En nuestro caso, tuvimos la oportunidad de enfrentarnos a Brais, líder del gimnasio tipo planta. Entre sus Pokémon tenía un Smoliv y un Sudowoodo. Antes de esto, tuvimos que participar en un pequeño minijuego que consistía en encontrar varios Sunflora escondidos por Pueblo Altamía, y así demostrar que somos aptos para el combate.
Los líderes de gimnasio siguen manteniendo un mismo patrón que en Pokémon Espada y Escudo con su modo Gigamax. Cuando un líder está apunto de ser derrotado, utilizará en este caso la Teracristalización como último recurso para acabar con nosotros. Si logramos terminar con él, recibiremos la medalla del gimnasio y nuestro nivel de captura aumentará. Esto es muy importante, porque sin las medallas no podremos capturar Pokémon salvajes de niveles altos. Una limitación que no existía en Leyendas Pokémon: Arceus y que se agradece en Escarlata y Púrpura para marcar mejor el ritmo del juego.
En segundo lugar tenemos la Vía Stardust. Parece que los gamberros de la Academia han formado varios grupos y construido distintas bases por Paldea. Nuestro objetivo será entrar y terminar con ellas.
Cada vez que accedemos a una base del Team Star, tendremos que seleccionar a tres pokémon de nuestro equipo y enfrentarlos en combates libres (batallas sin turnos) antes de que acaben con nosotros. La idea es elegir Pokémon que sean eficaces contra el elemento del Team Star. En nuestro caso fue el fuego, así que nuestro equipo estaba compuesto por pokémon de tipo agua, entre ellos Wigglet.
La mecánica de los combates libres es muy sencilla: solo hay que decidir el lugar dónde lanzamos la pokéball y ahí irá nuestro pokémon. Lo importante aquí es gestionar bien nuestro equipo para que ninguno pierda energía en combate.
Al final de cada base del Team Star, tendremos que enfrentarnos a un líder y a su AutoStar, el camión en el que van montados. Las batallas pueden tener diversos efectos que las harán un poco más complicadas, en esta en concreto, como hacía mucho sol, los ataques de agua se volvían poco eficaces.
Por último tenemos la Senda Legendaria. Este camino de la historia nos llevará a investigar a los Pokémon Dominantes, que serán mucho más grandes de lo normal y que nos recuerdan a las batallas de los Pokémon Señoriales de Leyendas Pokémon. En esta aventura nos acompañará Damián, que hará de instructor para que aprendamos más sobre la comida y cocina del mundo Pokémon.
Desde luego, trifurcar la historia y permitir al jugador elegir por dónde empezar, o cuándo quiere retomar una u otra, es algo muy novedoso en la franquicia. No solo nos hace sentir que tenemos la oportunidad de elegir, si no que si estamos cansados de avanzar por un lado, siempre podemos cambiar a otro. Lo ideal sería avanzarlos al mismo ritmo, pero estamos deseando ver qué pasa si escoges completar directamente una ruta y cómo afecta a las otras.
Además de la libertad de elegir, se potencia algo que ya pudimos ver en Leyendas Pokémon: el mundo abierto. Paldea se ha convertido en un enorme mundo abierto que tendremos que recorrer en busca de pokémon salvajes o para trasladarnos de un lugar a otro.
El vehículo que utilizaremos será Miraidon o Koraidon, y nos permitirá correr, nadar, planear e incluso trepar por paredes. Es como una fusión de Sneasler, Braviary, Basculegion y Wyrdeer, que queda muy bien empastado en un único pokémon. Eso sí, todas las funciones de estos pokémon legendarios no estarán disponibles al principio, así que tendremos que avanzar la historia para poder recorrer Paldea en condiciones.
Durante nuestro recorrido por las zonas salvajes, podremos lanzar pokémon para que recojan objetos por nosotros o entren directamente a las batallas. Los pokémon salvajes se encontrarán frecuentemente en manadas y bastará con chocarse con uno para iniciar el combate.
Además de haber Centros Pokémon repartidos por todo Paldea, también podemos encontrar entrenadores dispuestos a combatir. Nos llamó especialmente la atención que no nos obligasen a luchar, si no que podíamos decidir si queríamos entrar en la batalla o no.
El mundo abierto de Paldea es muchísimo más grande que las zonas que se presentaban en Leyendas Pokémon: Arceus, pudiendo compararse a priori con el mapa de The Legend of Zelda: Breath of the Wild en extensión. No pudimos explorarlo todo, pero nos daba la impresión de ser un mundo gigantesco.
Si el fenómeno especial de Pokémon Espada y Escudo era el Gigamax, en Pokémon Escarlata y Púrpura tenemos la Teracristalización. Esto permitirá modificar temporalmente el tipo de un pokémon y beneficiarse de sus efectos, algo que cambiará por completo nuestra estrategia en batallas.
Game Freak ha querido mantener las incursiones de Pokémon Espada y Escudo, en este caso llamadas Teraincursiones. Podremos reunirnos a hasta 4 jugadores para derrotar a un Pokémon teracristalizado. Estas incursiones se pueden encontrar repartidas por todo el mapa de Paldea en enormes cristales, y los jugadores se podrán unir mediante un código.
Otra novedad de Pokémon Escarlata y Púrpura que pudimos probar fue el modo multijugador. Hasta 4 personas pueden reunirse en Paldea y recorrer el mundo abierto en compañía. Los jugadores pueden combatir entre ellos o intercambiar pokémon. Además, cada uno puede ir a su aire a capturar pokémon salvajes. Más que un modo cooperativo, se trata una experiencia en compañía donde pasar el rato con amigos para hacer carreras, echar unos selfies o rellenar la Pokédex. Nos parece un modo muy interesante para relajarse y compartir experiencias.
Pokémon Escarlata y Púrpura mantendrá el Repartir Experiencia en el equipo Pokémon. Cada integrante de nuestro equipo se verá beneficiado con experiencia extra dependiendo de si ha combatido o si tiene un bajo nivel.
También se mantiene el Campamento Pokémon bajo el nombre de Picnic Pokémon: un lugar donde podemos reunir a nuestro equipo y darle mimos para que la amistad aumente. También podemos crear bocatas con efectos especiales, entre ellos subir los puntos de salud a nuestros pokémon.
Lo que hemos probado de Pokémon Escarlata y Púrpura nos ha dejado buen sabor de boca, no solo porque esté ambientado en España, sino porque las mecánicas de juego han evolucionado para hacer un juego más accesible, variado y divertido para los jugadores.
Hay quien preferirá recorrer toda Paldea para completar la Pokédex, y seguramente otros jugadores opten por llegar primero hasta la Liga Pokémon. Esta vez el camino lo elegimos nosotros, a nuestra manera, y eso hará que la experiencia de cada uno sea mucho más personal y divertida. La parte mala es que, visualmente, no creemos que esté a la altura de Nintendo Switch, dejándonos la sensación de que, incluso Pokémon Espada y Escudo, se veían mucho más bonitos y estables.
No todo recae sobre la potencia gráfica y no es que Pokémon Escarlata y Púrpura se vea feo. Tiene partes en los que se ve realmente bonito, pero creemos que el apartado artístico poco contrastado no le hace ningún favor. En esta versión hemos visto problemas técnicos en el mundo abierto, como pop-in de elementos lejanos y carga lenta de texturas que, esperamos, se suavicen más adelante.
Tras las primeras impresiones de Pokémon Escarlata y Púrpura, pronto os traeremos nuestro análisis y opinión final sobre el juego. Mientras podéis echar un vistazo a nuestra lista de juegos para Nintendo Switch ¡Nos vemos en Paldea!