La nueva aventura golfística de Mario en Nintendo Switch se llama Mario Golf: Super Rush, y en este análisis os contamos qué nos ha parecido.
Puede que si se os viene a la mente un juego de golf no sea muy atractivo, pero si va acompañado de Super Mario al menos sabes que va a llevar el sello de calidad de Nintendo. Tras una correcta aventura con Mario Tennis Aces que no alcanzó nuestras expectativas, Camelot le ha dado una vuelta a la clásica saga Mario Golf que tantas alegrías nos trajo en el pasado, especialmente con la entrega de Game Boy Advance. Os contamos qué nos ha parecido el retorno del deporte más técnico de Super Mario en nuestro análisis de Mario Golf: Super Rush para Nintendo Switch.
Una enorme parte de los jugadores de consolas de Nintendo lleva años y años pidiendo que Camelot reviva la saga Golden Sun, un videojuego muy distinto a los que nos ha dado durante la última década, todos ellos centrados en la faceta deportiva de Super Mario. Desde 1999, Camelot lleva encargándose de materializar la saga Mario Golf en consolas de Nintendo, y lo ha vuelto a hacer, por primera vez, en una consola en alta definición como es Nintendo Switch.
Llevamos ya unas cuantas entregas de Mario Golf a nuestras espaldas, y de primeras puede parecer una idea que pretende exprimir la imagen de Super Mario de cualquier forma aleatoria que se le haya ocurrido a Nintendo. Por suerte, con el paso de los años, hemos visto que los juegos deportivos del fontanero no tienen precisamente mala calidad, y se tratan de juegos tipo arcade divertidos y variados, orientados a todos los públicos y normalmente muy enfocados al modo multijugador.
Mario Golf: Super Rush es un oasis en la lista de últimos juegos deportivos de Super Mario, principalmente porque abraza el modo para un jugador ofreciendo una historia más acorde a lo que teníamos en el clásico Mario Golf de Game Boy Advance: una especie de RPG en la que nuestro protagonista debía convertirse en una leyenda del golf.
Dentro de lo que cabe, se ha mantenido bastante bien la esencia que hacía especial aquel juego, y aunque no es algo tan fantasioso como resultó el argumento de Mario Tennis Aces y su raqueta diabólica, Mario Golf: Super Rush resulta entretenido centrando todos sus esfuerzos en una gran jugabilidad muy técnica pero accesible para todos los públicos.
Nintendo ha dado algo de manga ancha a Camelot para que modifique y haga especiales a algunos personajes clásicos de Nintendo, pero siguiendo la limitada estela de Paper Mario: The Origami King. Es por eso que la variedad de personajes es escasa, limitándose a los clásicos Toad de colores, personajes secundarios como Birdo o Toadette, y dando una gran e incomprensible presencia al enemigo Placapum, que ni en sus mejores sueños se imaginaba tener un papel tan protagonista como en Mario Golf: Super Rush.
Nuestro protagonista estará encarnado por un Mii a elección, pudiendo editar cosas como su ropa para ajustar el avatar más a nuestros gustos. Nos ha sorprendido la poca presencia hasta los últimos compases del juego de los protagonistas de Super Mario, casi todo el rato derivando algunos papeles importantes a casos como el de Placapum que os hemos comentado antes.
En general, Mario Golf: Super Rush nos lleva de la mano en cualquier situación; ya sea para jugar con amigos en su modo multijugador, con los protagonistas de Mario dando la cara, como en la aventura para un jugador, con un pequeño mundo encantador y agradable y unos personajes poco profundos que cumplen su cometido.
Con un juego tan técnico como Mario Golf: Super Rush, es importante que tengamos unos entornos y modelados muy bien construidos y diseñados. Se trata de un juego de golf como podría ser otro de estilo realista, así que por esto Nintendo y Camelot han centrado sus esfuerzos en que el juego corra fluido y tenga unos modelados bien definidos, sin darle mucha importancia a la calidad de las texturas.
Sí que afea un poco la vista tener rocas o suelos con un nivel de detalle bajo, pero creemos que, en general, se ha hecho un buen trabajo técnico y gráfico al hacer que el juego funcione tan fluido.
Parece muy influenciado por Mario Tennis Aces, pudiendo colar como un sucedáneo del mismo juego con algunas mejoras visuales. Se nota que Mario Golf: Super Rush ha tenido un desarrollo mucho más distendido, porque la calidad de las animaciones y funcionamiento general es notablemente mejor.
Mario Golf: Super Rush en el modo televisor de Nintendo Switch corre en los hoyos a una resolución entre los 754p y 900p, mientras que en el pueblo, que hay una mayor carga gráfica y mucho más nivel de detalle, el análisis técnico indica que se mantiene en los 720p. En los hoyos se mantiene una frecuencia de refresco de 60 imágenes por segundo estables, mientras que en las diferentes zonas del mundo varía entre 50 y 60. Es cierto que en modo portátil, la resolución en ocasiones baja muy por debajo de los 720p y se vuelve la imagen borrosa, pero nada preocupante y solo ocurre en momentos puntuales.
Dentro de lo que cabe, y para tratarse de un juego de golf-fantasía de Super Mario, se ha tenido la cabeza bastante en el suelo en lo relativo a entornos y escenarios. No habrá cosas excesivamente descabelladas, y lo agradecemos, porque con lo “serio” que puede ser este Mario Golf tampoco queríamos que se convirtiera en una verbena.
En el modo televisor y en los hoyos, tenemos una resolución variable entre los 754p y 900p. Se mantiene una frecuencia de refresco de 60 imágenes por segundo estables en los hoyos.
Los personajes protagonistas han tenido un pequeño rediseño, ajustando su ropa a este nuevo videojuego, y encontrándonos, por ejemplo, a Wario y Waluigi con sombreros muy cucos. También es la primera vez que vemos de serie a Pauline o el Rey Boy-Omb como personajes jugables en Mario Golf; es cuestión de gustos, aunque creemos que, al igual que se hizo en Mario Kart, habría sido una buena oportunidad para hacer un pequeño crossover con otras sagas de Nintendo, en lugar de meter a personajes que rozan al límite el concepto de secundarios.
La interfaz es bastante clara y comprensible, heredada casi en su totalidad de anteriores juegos de Mario Golf y cambiando cosas que pueden despistar a los jugadores más veteranos, como los indicadores de la barra de golpeo, o la situación de algunos menús.
Hemos notado algunos problemas en el motor de colisiones aplicado al personaje contra elementos móviles, que entran en contacto incluso estando a bastante distancia y resultando frustrante.
Los juegos deportivos de Super Mario son sinónimo de una banda sonora mediocre en su mayoría, y Mario Golf: Super Rush no se libra de este San Benito. Tras un terrible trabajo en Mario Tennis Aces, Camelot nos da una segunda dosis de escasez creativa musical en este nuevo juego de Golf, pudiendo ser la banda sonora de cualquiera de los juegos deportivos de Mario anteriores y la mayoría de jugadores no se darían ni cuenta.
Al menos, los personajes principales tendrán nuevas voces y sonidos. Porque siempre estamos encantados de escuchar la dulce voz de Waluigi.
Nintendo ha tenido el detalle de localizar el juego completamente al español, pudiendo encontrar tanto los textos como la voz del comentarista en este idioma.
Si hay algo que diferencia a Mario Golf de otros juegos deportivos del fontanero es que su curva de dificultad, aprendizaje de mecánicas y concepto jugable es mucho más maduro y técnico. Y como jugadores experimentados, lo agradecemos mucho.
Mario Golf: Super Rush tiene una base bastante sencilla y simple, pero su jugabilidad está tan bien construida que podría convertirse en un eSport tal y como está. La música no, pero la experiencia de juego es una cosa que Camelot trabaja a conciencia, y sus juegos siempre suelen tener un acabado muy divertido y redondo.
Este juego no es la excepción; tras su careta de título familiar para divertirse con amigos, se esconde el juego deportivo de Super Mario más complejo. Cada vez que ejecutamos un tiro, tendremos que hacer un pequeño análisis para predecir el destino de la bola, que se verá influenciado tanto por factores internos como la potencia del golpe, el efecto y un mínimo azar, como por externos como el viento, la inclinación y tipo de terreno, además de objetos ubicados en la pista y acontecimientos que sucedan en el campo, y esta es una de las mejores cosas que tiene Mario Golf en Nintendo Switch.
Nos encanta que sea un juego de esos que puede ser fácilmente controlable por jugadores que lo usan por primera vez, pero que dominarlo cuesta sudor y lágrimas. La marca de la casa “Mario” se corona en Super Rush como un juego muy accesible, divertido y arcade, pero que también puede ser muy técnico, complejo y desafiante.
Puede que a los más pequeños les resulte algo complicado el modo historia en algunos puntos, pero nos parece que su dificultad está muy bien balanceada. Su curva tiene algunos picos que no llegan a desesperar y que nos empujan a seguir intentando superar nuestras puntuaciones.
Mientras que el modo “Aventura de golf” se traduce en un modo historia tradicional de unas 8 a 10 horas, el modo “Golf a tu aire” son partidos libres, principalmente enfocados al modo multijugador, y que podremos hacer de cualquiera de las formas de juego disponibles.
Este Mario Golf estrena una mecánica que no nos ha terminado de convencer: el Golf Rápido. Consiste en ir corriendo tras la bola y recorrer los hoyos… de una forma un tanto torpe y tosca. Puede ser divertido como componente multijugador party, pero nos ha cortado bastante el rollo en el modo historia. Este proceso de desplazamiento hace que todos los jugadores intenten llegar cuanto antes al green, pudiendo interactuar unos con otros e incluso con la pelota de otro jugador. En este sentido, estas “batallas” pasan a ser muy arcade, rompiendo un poco lo más puro que tenía Mario Golf.
Por supuesto, el Golf Rápido no siempre estará activado, y podremos seguir jugando al Golf Tradicional en ocasiones puntuales del modo historia o en uno de los modos del menú.
Como Mario Golf: Super Rush sale en Nintendo Switch, Nintendo ya ha preparado algunas ideas locas para hacer el juego más divertido y familiar. Que es algo que les encanta.
La primera de ellas, y la más obvia, era incluir controles por movimiento. Al igual que ocurría en el mítico Wii Sports, podremos golpear la bola haciendo un gesto con los Joy-Con de Nintendo Switch. Este sistema de juego puede gustar a los jugadores más ocasionales, pero desde el punto de vista más tradicional, se hace bastante más impreciso que manejarlo con botones.
Si tenéis una suscripción a Nintendo Switch Online podréis aprovecharla para jugar a través de internet en Golf a tu aire. Hasta dos personas podrán jugar desde la misma consola a través de internet, como ya ocurre en Mario Kart 8 Deluxe. Estarán disponibles las tres modalidades, y será unos de los pocos juegos que harán uso del sistema de invitaciones de juego de Nintendo Switch, que nos permite unirnos a las partidas directamente desde el menú de amigos. Bastante arcaico, por cierto, porque nos obliga a salir del juego para unirnos a la sala de un amigo. Como siempre, todo “muy Nintendo”.
Mario Golf: Super Rush es el primer juego de Nintendo en hacer uso del sistema de invitaciones de juego en línea.
En lo relativo a su funcionamiento, hemos notado un poco de lag en nuestras partidas; algo molesto que se evidencia aún más si jugamos al modo Golf Rápido, que congela la imagen mientras vamos corriendo. No ocurrirá lo mismo mientras hacemos los tiros, y menos mal, porque fastidiaría completamente la experiencia si la barra de selección de fuerza de tiro fuera a trompicones.
La versión de este análisis de Mario Golf: Super Rush es la 1.0, y no incluye ninguna clasificación online ni sistema de puntos que exprima al Nintendo Switch Online, así que consideramos que está realmente desaprovechada esta característica.
Por supuesto, también podremos jugar partidas de golf tradicionales por turnos en la misma consola, con hasta cuatro jugadores en el modo tradicional y dos en el modo Golf Rápido. Parece que se debe a una limitación de espacio útil en la pantalla, y posiblemente, algún que otro problema técnico.
Mario Golf: Super Rush funciona bastante bien en modo portátil, con una reducción en la calidad visual más notoria en pistas con efectos climáticos, pero manteniendo muy bien el tipo. Nos ha resultado extraño que no se haya habilitado un control táctil, aunque fuera para moverse por los menús, que no resultan tan intuitivos como nos gustaría.
Nintendo siempre se las ingenia para que los juegos deportivos de Mario se sientan algo frescos, y con Mario Golf: Super Rush han querido tocar una de las bases del golf para darle “algo más” de Super Mario. El Golf Rápido no es una innovación brillante, especialmente para los jugadores tradicionales que se centran más en las técnicas del golf, pero es algo que puede gustar mucho a los jugadores ocasionales que jueguen partidas multijugador.
La Aventura de Golf, el modo historia de Super Rush, se nos ha pasado volando. Es muy entretenido para tratarse del modo historia de un juego de golf, que a priori puede sonar terrible, pero Nintendo ha sabido manejarlo correctamente. Un poco más simplificado que lo que vimos en Game Boy Advance, pero para un fan de aquel juego, esto será como un trago de agua fresca en medio del desierto.
Tiene las bondades y carencias clásicas de los juegos deportivos de Super Mario: una muy buena opción para modos multijugador local y algo escaso de contenido en lo relativo al modo online.
Si os ha gustado el análisis de Mario Golf: Super Rush, os recordamos que podéis echar un vistazo al top de Nintendo Switch desde aquí.